El pasado martes, 13 de febrero, Rocío Martínez Cunha, directora general de Alveus Investing, participó en la Puntilla, un espacio de asesoramiento financiero de Radio Intereconomía y conducido por Susana Criado.
En la entrevista, Rocío habló sobre las diferencias entre el asesoramiento financiero independiente y no independiente y qué aspectos debe tener el cliente en cuenta.
De este espacio de algo más de cinco minutos de duración, os dejamos algunos de los principales bullet points:
“No es mejor una opción que otra. Ambas formas son perfectamente válidas en la prestación de servicio de asesoramiento siempre que el asesor ofrezca activos de calidad orientados a cubrir necesidades del cliente como a su perfil»
«Lo más importante es cumplir con la normativa MiFID. El asesor debe ser transparente y el cliente conocer qué tipo de asesoramiento va a recibir»
«Si algo no es independiente suena a que es dependiente… La función del asesor es cuidar del ahorro e inversiones de cliente, y no es ético que asesores piensen en colocar productos de terceros mediante intermediación a cambio de recibir unas comisiones. Así se perjudica gravemente la rentabilidad»
«Inicialmente, parece lógico pensar que el asesoramiento independiente es más caro. Los ingresos de un asesor financiero independiente se limitan a lo que cobran por parte del cliente, y los ingresos de un asesor no independiente vienen determinados por el servicio de intermediación, de cobro de retrocesiones… De cara al cliente, parece que paga menos.
Realmente, cuando el pago no es directo del cliente, suele venir restado de la rentabilidad. Lo que hace el asesor es invertir en clases más caras y las gestores le retroceden ese exceso de comisiones. Lo que está claro es que el asesor no va a dejar de cobrar».
«Esto no está mal ni bien siempre que el inversor o cliente sepa que su asesor es no independiente, que cobra incentivos y que conoce el coste. El inversor, a veces, no sabe esto o no hace cálculos para saber cuánto de más le cuesta entrar en productos más caros».
«MiFID viene para proteger al cliente. Un mismo producto puede tener diferentes comisiones en función de quién lo contrate. Cuando un inversor contrata un fondo, lo primero que debe de hacer es mirar qué clase se adapta más a su condición. Cuanto más alta es la comisión, su rentabilidad irá en detrimento».
«Cuando hay un asesoramiento financiero independiente, el asesor recurrirá siempre a la clase limpia, la que no tiene retrocesiones».
Aquí puedes escuchar la Puntilla al completo
Rocío Martínez Cunha, directora general de Alveus Investing
