Estimado amigo,
En tan solo 15 días, el mercado ha vuelto a poner en jaque todas las previsiones financieras habidas y por haber. Hoy, 12 de marzo, nos volvemos a encontrar en un momento que nadie tiene nada claro. Me encanta mi trabajo, cada día y cada año sorprenden tanto para lo bueno como para lo malo. Estamos ante un año que nos vuelve a sorprender.
Básicamente, los analistas financieros se debaten entre si es una simple corrección temporal o por el contrario estamos ante un cambio de ciclo y las bolsas entrando en un “bear market”. Por lo pronto, las caídas están siendo rápidas y severas. Tras consultarle a mi bola de cristal lo tengo claro, pero la sensación es que nadie sabe nada.
La realidad es que tenemos una situación macroeconómica, diría mundial, por no extenderme, bastante buena. USA pleno empleo, beneficios enormes en las compañías y muchos datos más. En Europa tenemos un incremento de la inversión (500.000 millones) brutal para impulsar la economía. E incluso China, está con ganas de agradar al mundo, con una economía saliendo de una fuerte recesión. Vamos todo pinta muy bien.
Quiero destacar también las valoraciones, especialmente del sector tech, todavía alegres, a pesar de los 80.000 millones de beneficios recién reportados por Nvidia hace tan solo unos días. Hoy ya nadie habla de IA y la tech ni sirve. Lo que es el ser humano.
Por último, tenemos a la administración americana con un discurso que ha disparado el nivel de desconfianza en su economía. Un discurso torpe que parece por momentos que no saben ni lo que hacen y lo que es peor, ni les importa. Han generado mucho ruido y además pocas nueces. Pongo y quito aranceles, una política que en muchos casos es pegarse un tiro en su propio pie.
En definitiva, una mala gestión que llena de incertidumbre a los mercados. Esto a los inversores no nos gusta nada como estamos viendo y la volatilidad vuelve a estar por los cielos. Lo que tiene impacto sobre el sentimiento económico y la confianza del consumidor.
¿Qué va a ganar: los fundamentales macro o el sentimiento de mercado? El mercado siempre es soberano.
Por el momento, el objetivo es claro: carteras diversificadas, mucha tranquilidad y liquidez. Recomiendo dentro de esta estrategia tener identificados los productos y niveles de inversión. Con la idea de siempre invertir en buenos activos a buenos precios. Parece fácil, ¿no?
Un abrazo,
David Levy
