Los tipos de los bonos del Tesoro de EE.UU. a 10 años subieron rápidamente en marzo, concretamente 20 puntos básicos desde los mínimos del mes, después de que la lectura del IPC de febrero fuera, con un 3,2%, ligeramente más alta de lo previsto y superior al 3,1% de enero, que también superó las previsiones. La inflación está resultando ser más persistente de lo esperado, sobre todo en los servicios, lo que deja toda la responsabilidad a la inflación de los bienes. Dado que el crecimiento también emite señales de resistencia, el tono expansivo del presidente de la Fed, Jerome Powell, tras la reunión del FOMC de marzo parece un tanto incongruente, sobre todo habida cuenta de que la Fed revisó al alza su previsión de crecimiento para este año y sus proyecciones sobre los tipos de interés en 2025.
