Estimado amigo,
Yo no soy nadie para decir si la Fed se equivoca … o quizás sí.
La Reserva Federal ha bajado los tipos 50pb en su última reunión de la semana pasada.
La economía está creciendo al 3% y la inflación está algo más controlada, pero no del todo. Además, los datos macroeconómicos no han variado casi nada en estos últimos meses y no justifican esta acción.
La reflexión aquí es que todavía estamos en un escenario ideal, definido por una inflación estabilizada y una economía estadounidense en enfriamiento, pero aún fuerte. Con lo cual, quizás estemos ante otro “error” de la FED.
Si esto es así, a medio plazo por lo menos esto son buenas noticias, ya que favorece de manera especial a todos los activos de “riesgo”.
La idea es que un recorte agresivo de las tasas de la Fed ahora puede realmente interrumpir el mejor momento de todos los mundos en el que nos encontramos, en parte al impulsar un repunte de las acciones y conducir a una batalla aún más larga contra la inflación. Es decir, de una manera irónica, un relajamiento agresivo en las tasas ahora podría llevar el índice S&P500 a unos niveles de 6000 puntos, antes de que la propia FED se dé cuenta y rectifique su “error”.
Esto ya ha pasado en el 2021. Con la inflación disparada, la FED cometió un error histórico de considerarla “transitoria” y mantuvo los tipos intactos a niveles cercanos al 0%. Tardó casi un año en empezar a subir los tipos y el resultado fue una subida del 28% en el índice S&P500 a la cual siguió una corrección dolorosa en el 2022, sobre todo en la renta fija. Año que muchos tardaremos en olvidar.
¿Se está volviendo a equivocar la FED?
Si es cierto que están cometiendo un error al añadir liquidez cuando la economía sigue fuerte, es difícil no pensar que los activos de riesgo seguirán una senda alcista.
En la vida y más en los mercados financieros, al final del día lo que realmente importa es tener claro las intenciones de la FED y no tanto si sus acciones son correctas o no. La realidad es que el mercado sigue a la FED más que a la economía, por lo menos hasta que estos reconocen su error.
Mi recomendación deja la crítica de lado y a seguir disfrutando de las buenas noticias.
Un abrazo,
David Levy