Se acaba el 2012, un año complejo en el cual hemos trabajado mucho y ha lucido poco. Empezamos el 2012 con mucha liquidez y mucho dólar ya que nos temíamos lo peor. En julio parecía que iba a llegar el colapso financiero europeo. Entonces llegó el calor del verano para aportar reflexión y serenidad a los mercados. Nos despertamos en septiembre con más políticas monetarias expansivas de USA y Europa para frenar la quiebra de Grecia y reactivar la economía. Por el momento, han conseguido ganar tiempo.
En los últimos meses del año, hemos propuesto iniciar un cambio a nivel estratégico (Largo Plazo–2 años!). Pensamos que tener mucha liquidez se va a convertir en un coste de oportunidad muy caro. Debemos incrementar nuestro nivel de riesgo.
Adjunto el detalle de nuestras recomendaciones por clase de activos:
A nivel macroeconómico va a predominar: la austeridad, el desapalancamiento, poco crecimiento, baja inflación y bajos tipos de interés. Por eso todos los semáforos están en ámbar. Todo indica que solo podemos esperar moderadas rentabilidades de los mercados.
No omitamos el grave problema de deuda americana (más del 500% PIB) y deuda europea (más del 300% del PIB) que día a día sigue aumentando. Por lo tanto, hay que ser muy selectivo y tener una buena diversificación de activos. No va a ser un año para seguir a los índices, ni para estrategias de “buy and hold”. Volverá a ser, como siempre, un año lleno de cambios, fuertes emociones y sorpresas.
Ya tengo ganas de que empiece: ¡Felices Inversiones 2013!
David Levy,
Presidente de DiverInvest Asesoramiento EAFI